Este proyecto fue un reto para Fuzionía ya que implicaba crear la identidad de una marca para dos espacios comerciales muy distintos entre sí, uno ubicado en calle Atocha 28 y otro en calle Huertas 57.
La aparición de la marca se produce al mismo tiempo que Fuzionía diseña los elementos que definen su branding, trabajando en conjunto con el departamento de marketing.
A través de este trabajo integral pudimos definir colores, distribución de espacios y señalítica.
Fuzionía trabajó junto al departamento de marketing para desarrollar el branding y su diseño.
El propietario fue una base de inspiración para la creación de Almanova como proyecto de interiorismo. Su principal objetivo era ofrecer y recibir a su cliente en un espacio en el que se sienta a gusto. Para lograrlo, utilizamos materiales como la madera en tonos claros, iluminación cálida y mobiliario diseñado a medida.
Pese a que los dos locales debían de guardar una estética común, cada uno presentaba retos particulares. En el caso de Atocha, pudimos crear una doble altura y aprovecharlo como despacho para el director de Almanova. En el caso de Huertas diseñamos espejos en paredes para generar más amplitud en el local.
Cada elemento de mobiliario fue diseñado a medida con el objetivo de reflejar la imagen corporativa de Almanova, buscando ante todo un espacio cálido y acogedor para el cliente.
Ya que se trataba de un local a pie de calle, utilizamos materiales resistentes y de fácil mantenimiento.